Miguel Arias ya conduce hacia el cielo
đ€âïž La sociedad zamorana llora la pĂ©rdida del conocido y querido empresario, quien en 1966 fundada las Autoescuelas Arias, donde se han formado generaciones enteras de conductores.
đ€âïž Hombre amable, cercano y siempre sonriente, sus restos son velados en el tanatorio La Soledad y la misa de funeral se celebra este lunes a las 17 horas en San Torcuato.
La sociedad zamorana y el mundo de la empresa despiden este lunes 10 de junio a Miguel Arias Arias, fundador y propietario de las Autoescuelas Arias, que desde 1966 han formado a generaciones enteras de zamoranos para ponerlos al frente de sus vehĂculos, tanto particulares como de servicios profesionales.
Conocido y muy querido en la ciudad, Miguel Arias fallecĂa este domingo a los 87 años de edad tras unos años de delicada salud, aunque pudo ver casarse a una de sus nietas mayores hace apenas una semana en una de las celebraciones mĂĄs emotivas de su gran familia. Pero este fin de semana se ponĂa por Ășltima vez al volante para subir directo al lugar donde descansan los hombres buenos; Miguel Arias ya conduce hacia el cielo, a la presencia de ese Dios en el que cree.
Con sus padres procedentes de Galicia, Miguel Arias venĂa de una familia de ocho hermanos -quĂ© solita te quedas ya, tĂa Carmina– , y formaba la suya propia en la tierra zamorana con su compañera eterna de vida, Elisa RodrĂguez de Dios, siendo padres de cuatro hijos: JosĂ© Miguel, Laura, Elisa y Carlos, quienes a su vez les han hecho abuelos de siete nietos, unidos todos como una piña en el amor a los suyos y a esta tierra. AquĂ echaron sus raĂces y se han aferrado a sus afectos y costumbres, con amigos del alma para siempre, como su otra familia de Las Villas, donde vivĂan inolvidables veranos.


Hombre afable, siempre sonriente, siempre contento, Miguel Arias recibĂa en el año 2011 la Medalla a la DedicaciĂłn Empresarial que otorga la CĂĄmara de Comercio e Industria de Zamora en reconocimiento a sus muchos años de arduo trabajo para consolidar una de las empresas con mayor trayectoria de la ciudad, donde se han formado miles de conductores. No en vano, Autoescuelas Arias era prĂĄcticamente el destino primero donde aterrizaban todos los jĂłvenes zamoranos con los 18 reciĂ©n cumplidos para obtener sus licencias de conducciĂłn durante el verano.
Por encima de su ingente labor formativa y empresarial, Miguel Arias deja un recuerdo imborrable entre quienes le hemos conocido por su bondad y alegrĂa, su conversaciĂłn animada y su gran humildad, con un trato siempre cercano y cariñoso con todos y sin desfallecer ni un solo momento en sus Ășltimos años, con su salud ya debilitada, pero fuertemente arropado por su inseparable Elisa y su gran familia y tambiĂ©n apoyado en su fe inquebrantable en una vida mejor al otro lado de la vida.
Desaparece asĂ uno de los empresarios mĂĄs queridos de Zamora y una figura irrepetible, pues a Miguel era imposible no quererlo, aunque deja su autoescuela en las mejores manos y mĂșltiples vivencias y anĂ©cdotas entre los zamoranos y amigos, con una huella imborrable en el corazĂłn de esta ciudad.
Los restos mortales de Miguel Arias son velados en la sala VIP del tanatorio de La Soledad (calle Horta) y la misa de funeral tendrå lugar este lunes a las 17 horas en la iglesia de San Torcuato, para proceder después a su traslado al crematorio de La Soledad-Viuda de Mendiri, donde serå incinerado.
(Todo mi amor para la familia Arias RodrĂguez, con quienes tantos momentos bonitos he compartido desde niña. Descansa en Dios, querido Miguel)

Mi mås sentido pésame
Me uno al dolor de la familia.
D.E.P.