Lentejas, el tesoro de la Tierra de Campos
La Lenteja de Tierra de Campos es una legumbre cuya excelencia ha sido reconocida por la Administración al quedar demostrado un vínculo real entre su calidad y su origen geográfico. Se cultiva en una zona seleccionada de la comarca de Tierra de Campos que se extiende por las provincias de León, Palencia, Valladolid y Zamora que se caracteriza por ser una tierra de llanuras alomadas en cuya inmensidad asoman los palomares hechos de la misma tierra en la que se cultivan las lentejas.
En el caso de la provincia de Zamora, la demarcación geográfica incluye 38 municipios de la comarca Campos-Pan (también la capital, Zamora), muchos de ellos vertebrados por el río Valderaduey; cuatro de Benavente y los Valles y dos de la comarca Bajo Duero.
Un suelo sin contaminación y un cielo puro prestan el marco ideal para el cultivo de la Lenteja de la Tierra de Campos donde el sol del mediodía, asì como las suaves o frías temperaturas matutinas y vespertinas crean un entorno agroclimático ideal que permite una lenta maduración de estas lentejas de excelente calidad, cultivadas con mimo y oficio por los agricultores de la zona.
Fácilmente distinguible, la Lenteja de Tierra de Campos es muy fina al paladar y su pequeño diámetro (entre 3,5 y 4,5 mm) hace que no pierda la cubierta cuando se cocina. La cubierta es de color pardo con puntos negros y el cotiledón es de color amarillo.
Su riqueza proteica y su alto contenido en fibra hacen de ellas un plato necesario en una dieta equilibrada. La excelencia de la cocina tradicional zamorana hace lo demás para que sean gloria bendita en el plato.