Restaurante Posada de las Misas, cocina de indulgencia plenaria en Puebla de Sanabria

🔴 Mónica Fernández Cifuentes, una de las mejores cocineras que ha dado Sanabria, fusiona la cocina más tradicional con pequeños y personales toques de innovación.

🔴 Ubicado en el corazón del casco histórico, la carta del restaurante es el escaparate de los mejores productos frescos y de cercanía de Sanabria y su comarca.

🔴 Si además de comer el cliente pernocta en la casona del S.XV, convertida en Real Posada, la experiencia es inolvidable.

Además de ser uno de los Pueblos Más Bonitos de España, Puebla de Sanabria puede presumir de un patrimonio espectacular y de un enclave privilegiado en una atalaya que se alza sobre río Tera.

En un ambiente idílico entre casas blasonadas de piedra y pizarra, miradores de madera, cuestas empedradas y rodeado de montañas y verdes prados, es fácil disfrutar de las bondades de una villa que ofrece además una gastronomía tradicional y unos productos locales de primerísima calidad.

Todo ello confluye en la Posada de las Misas, una casona del S.XV convertida en Real Posada, que cuenta con un restaurante donde el cliente puede disfrutar de un trato exquisito y relajado, unas vistas magníficas del entorno y de maravillosa cocina de Mónica Fernández Cifuentes, una de las mejores cocineras que ha dado Sanabria.

El restaurante

En la zona más alta de Puebla, frente al Ayuntamiento, en pleno casco histórico, la Posada de las Misas recibe al visitante con sus puertas y brazos siempre abiertos en invierno (cuando Puebla luce imponente con su iluminación navideña) y en verano, con su pequeña terraza exterior cerca de la iglesia de Santa María del Azogue y del Castillo. Casi nada.

El restaurante cuenta con un acceso independiente desde la calle que da paso a la barra del bar, donde se pueden degustar numerosas tapas y los vinos de las distintas D.O de Zamora, con especial presencia de los vinos de Toro. También hay lugar para los vinos de La Sierra de La Culebra, que aspira a contar en breve con su propia DOP, así como los famosos rosados de los Valles de Benavente.

El comedor está presidido por un inmenso ventanal que tiene como telón de fondo la montaña sanabresa, pura vida, pura maravilla. Tras el ventanal aparece la terraza del restaurante, todo un privilegio de mirador que domina el río Tera y unas espectaculares vistas.

Decorado en piedra y tonos neutros, con sus manteles blancos impolutos y sus sillas coloradas, el restaurante ofrece un ambiente muy agradable y acogedor, acorde al de la propia Posada. Si a la experiencia de comer añadimos la de pernoctar, es seguro que el cliente disfrutará de una estancia inmejorable en la villa.

Gastronomía

La carta del restaurante es todo un escaparate de los mejores productos locales de Sanabria y su comarca, así como de la provincia zamorana. Mónica Fernández combina sabiamente las recetas más tradicionales con toques propios de innovación que convierten la comida en un experiencia gastronómica inolvidable.

Quesos de Zamora, boletus y setas del bosque, cecina, pimientos del Bierzo, los tradicionales habones de Sanabria, pulpo, ternera sanabresa, ciervo, lechazo, bacalao, escabeche, trucha sanabresa, frutos rojos o miel de brezo conforman el grueso de una carta donde cada plato es un tratado de la buena cocina, una explosión de sabores sabiamente conjugados, que se rematan con un selección de postres caseros tradicionales.

Los habones con matanza o con carabineros, el pulpo a la plancha, los boletus con foie o al ajillo, las mollejas con setas y pimentón, el chuletón o el solomillo de ternera sanabresa (pura mantequilla que se deshace en la boca, la carne con mayor calidad de España), el ragut de ciervo con ciruelas, la carrillada de ternera o de lechazo, el solomillo de ciervo con ciruelas, el lomo de buey, el rabo de ternera con edulis; el bacalao confitado o con crema de oliva negra, la trucha sanabresa con gambas o el atún rojo semi cocinado son algunas de las recomendaciones en una carta donde cada plato es una apuesta segura. Una carta donde también es posible encontrar la tradicional sopa de ajo o sopa castellana o unos huevos fritos con chichas o con jamón, gloria bendita en el plato, que colman las aspiraciones de los amantes de la cocina casera y sin concesiones de la tierra.

Para finalizar, el toque dulce de una crema de arroz con leche con frutos rojos, una torrija, helado con miel de brezo o dulce de queso zamorano, entre otros postres, son el maravilloso broche a una comida digna de los mejores paladares y con unos precios bastante ajustados, teniendo en cuenta que hablamos de productos de cercanía, frescos y de máxima calidad que en otros establecimientos de esta categoría se disparan.

Y es que la de Mónica es una cocina de ciencia y paciencia, de conocimiento del producto y amor por lo que se hace, que es el mejor condimento que puede añadirse en las perolas. Ella lo hace por las enseñanzas bien aprendidas en casa y también por esa intuición que poseen los grandes de los fogones.

Convertir cada comida en un placer, en un pequeño milagro, es la filosofía de La Posada de Las Misas. Una comida bendecida por la mano del hombre, en este caso una mujer, que hace de la mesa un altar y de cada sabor una experiencia mística en un templo muy profano, un coqueto comedor que se alza sobre el Tera. En la Posada de las Misas, a la hora de la comida o de la cena, si oficia Mónica, el comensal cuenta con indulgencia plenaria.

Más que recomendado.

Posada Real de las Misas. Plaza Mayor, 13. Puebla de Sanabria (Zamora)

☎️ 980 62 03 58

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